El sistema de justicia tampoco ha actuado ante los excesos de militares, denunció el organismo, el cual destacó los asesinatos en retenes y la violación de menores.
AFP
Publicado: 31/01/2008 11:22
Nueva York. La utilización del Ejército en labores de policía para combatir al narcotráfico ha dado lugar a abusos por parte de los soldados, denunció este miércoles la organización de defensa de derechos humanos Human Rights Watch, en su informe anual de 2007.
"El año pasado soldados mexicanos han cometido notorios abusos mientras llevaban a cabo actividades de policía", alertó HRW, que citó varios casos en los que decenas de personas fueron detenidas, incomunicadas y golpeadas en bases militares por el Ejército.
HRW recordó el caso de cuatro menores violadas por los soldados en mayo así como la muerte de cinco miembros de una familia, entre ellos tres niños, abatidos en un retén militar.
El sistema de justicia mexicano, añadió el documento, "rutinariamente deja la tarea de investigar y procesar los abusos del Ejército" a la autoridad militar, la cual "carece de la independencia necesaria" y adolece de una "ausencia general de transparencia".
Igualmente, HRW lamentó el cierre en marzo por parte del gobierno mexicano de la fiscalía especial que investigaba la guerra sucia de los años 60, 70 y 80 (Fiscalía Especial sobre Movimientos Sociales y Políticos del Pasado), dejando en la "impunidad" los crímenes de esa época.
Otro agujero negro en cuanto a derechos humanos en México es la tortura, que sigue siendo un "problema generalizado" en el sistema judicial mexicano debido a "la aceptación por algunos jueces de pruebas obtenidas" torturando, agregó.
(La Jornada, 31 de enero de 2008)
jueves, 31 de enero de 2008
Acusa HRW al Ejército mexicano de violar garantías en combate al narco
miércoles, 30 de enero de 2008
Ejército mexicano continuará lucha contra cárteles: García Luna
"En la medida que la policía federal se consolide, tendremos la posibilidad de exponer menos a las fuerzas armadas”, dijo el titular de la SSP federal.
Reuters
Publicado: 30/01/2008 22:52
Washington. Pese a recientes denuncias de abusos, el Ejército Mexicano seguirá luchando contra el narcotráfico hasta que la fuerza policial del país esté lista para asumir por completo la tarea, dijo este miércoles el secretario de Seguridad Pública Federal, Genaro García Luna.
En una visita a Washington, el secretario se abstuvo de comentar las denuncias de violaciones a los derechos humanos por parte de las fuerzas armadas, incluidos casos de tortura, violación y homicidios contra la población civil, pero dijo que el Gobierno está comprometido para evitar los abusos.
“El gran reto es crear y tener el alcance que buscamos para cuidar y vigilar en todo momento los derechos humanos, y castigar si hay una violación”, agregó.
El presidente Felipe Calderón ha desplegado en varios estados del país a más de 25 mil efectivos entre militares y policías federales para combatir el narcotráfico.
El secretario señaló que el Ejército es “un gran respaldo” para el Estado mexicano e indicó que su retirada será lenta.
“Estamos constituyendo una policía institucional. En la medida que la policía federal se consolide, tendremos la posibilidad de exponer menos a las fuerzas armadas”, dijo.
El funcionario no aseguró si esa “consolidación” se dará este año, pero señaló que ese esfuerzo incluye la contratación de tres mil 500 universitarios para la policía federal, la formación de una academia polícial y el intenso intercambio y cooperación con Estados Unidos.
“No vamos a dar un paso atrás (en el combate al crimen organizado). Vamos a fortalecer las capacidades que tenemos, técnicas, humanas, y de inteligencia para operación”, afirmó.
México se ha convertido en el principal corredor de la droga que viene desde Sudamérica hacia Estados Unidos, su principal mercado consumidor. La disputa por esas rutas del tráfico ha generado una lucha sangrienta entre los grupos que dejó unos dos mil 500 muertos el año pasado en el país.
Durante su visita, García Luna se reunió con el secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, Michael Chertoff, con el principal diplomático del Departamento de Estado para América Latina, Thomas Shannon, con funcionarios del FBI, de la agencia antidrogas DEA, del Servicio Secreto y con congresistas estadunidenses.
Pese a que las conversaciones trataron de buscar “potenciar la cooperación” bilateral en la lucha antidroga, no se trataron nuevos detalles de la llamada Iniciativa de Mérida, dijo.
Bajo ese plan de tres años, el Gobierno de Estados Unidos daría este año unos 500 millones de dólares en ayuda a México para el combate antidroga, pero el proyecto ha enfrentado críticas de la oposición demócrata que controla el Congreso estadunidense.
(La Jornada, 30 de enero de 2008)
El Ejército seguirá en las calles
Jorge Carrillo Olea
El Ejército seguirá en las calles, decreta Calderón, y con ese decreto viola la Constitución, que dispone, artículo 129: “En tiempos de paz, ninguna autoridad militar podrá ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar.” De la misma manera se violó cuando en Tijuana la comandancia de la segunda región militar quiso atribuirse funciones de Ministerio Público, y se ha violado siempre.
Para mí no es un problema que el Ejército participe en estas acciones. En 1968 experimenté personalmente su presencia en las calles de Washington para reprimir brutalmente los motines que efectuaban negros en demanda de derechos civiles. Lo hemos visto también en países de alta civilidad, como Francia. El auténtico e insoslayable problema es que en México, a diferencia de aquellos países, se hace violando la Constitución y leyes secundarias. Nuestros gobernantes no han querido, por temor a la crítica, adecuar las leyes a los tiempos, muy particularmente las leyes militares que datan de los años 30 y aquéllas fueron inspiradas en las porfiristas. El Programa Sectorial 2007-2012, de la Secretaría de la Defensa Nacional, no contempla nada al respecto.
Los ejércitos tienen la función de coadyuvar al sostenimiento de las instituciones y, por tanto, del Estado, pero lo deben hacer en el marco de la legalidad y sufrir las sanciones en los casos en que se acrediten responsabilidades. Antes de su toma de posesión, el hoy Presidente confesó a quien iba a ser su secretaria de Gobernación, que no sabía nada del Ejército.
Esto no es un pecado. Se convierte en un grave error u omisión política, actuar sin consultar a quien tiene la obligación de saber, para eso existen los asesores y para eso es la función del refrendo de leyes y decretos. De esta manera hoy estamos viendo el “sí, señor presidente” de otros tiempos.
Adecuar la legislación castrense a la demanda de los tiempos es imperativo. No hacerlo coloca al militar y a la sociedad en una situación de verdadera indefensión jurídica que finalmente daña al propio Ejército y a la sociedad.
La situación descrita mucho tiene que ver con el pasmoso número de deserciones anuales. Es un problema añejo que ahora se ha hipertrofiado, porque cada día las leyes son más obsoletas y, por tanto, la discrecionalidad cada día es mayor, conduciendo a la más libre e impune arbitrariedad y abusos de autoridad.
La vida militar transcurre tras de cortinas. Nadie sabe su verdadero desarrollo y su impacto en la dignidad del individuo. Tómese de ejemplo lo siguiente: la ley previene que a un general no se le puede arrestar por más de 24 horas. Hace algún tiempo a un general, director del Hospital Central Militar, se le arrestó 15 días por mandar cortar unas ramas, dicha sanción corresponde exclusivamente a la tropa. El autollamado general Gallardo se equivoca en cuanto a su planteamiento del ombudsman militar, pero lamentablemente las violaciones a la dignidad y entereza del hombre se dan en todas partes todos los días, sin que haya recursos de apelación.
En estos tiempos en que se presume el cambio está la oportunidad para transparentar la vida militar y hacer las correcciones necesarias a leyes y procedimientos. De ello, además de los militares, será beneficiaria la sociedad.
Lamentablemente la ruta por la que se ha enviado al país es promotora de mayores conflictos: desempleo, pobreza, miseria en los servicios públicos –esencialmente salud–, huelgas, inseguridad y violencia; e ineficiencia en otros: energía, correos, etcétera. Esta situación obliga al gobierno a echar mano de todos sus recursos para mantener la estabilidad, pena es también que se olvide del recurso de primera mano que es la persuasión, la comunicación y el diálogo.
No, el gobierno transita con la mirada puesta en el cielo sin advertir lo escabroso que puede ser el camino. Gobierna a reacción, no a prevención o evitación de problemas, pero parece ser que así le gusta al Presidente. Se sintió valiente cuando declaró: “me gusta gobernar en la adversidad”.
(La Jornada, 30 de enero de 2008)
viernes, 25 de enero de 2008
Ordena Calderón mantener al Ejército en las calles hasta 2012
El Programa Sectorial de Defensa Nacional plasma la estrategia para el resto del sexenio
Responde así a los sectores que piden el retorno a los cuarteles y que la policía combata al crimen organizado
Se intenta resolver la descoordinación con la Secretaría de Marina
Jesús Aranda
Por decreto presidencial, el Ejército Mexicano mantendrá como una de sus principales tareas el combate al crimen organizado y al narcotráfico, al menos hasta 2012. Así lo establece el Programa Sectorial de Defensa Nacional 2007-2012, publicado ayer en el Diario Oficial de la Federación (DOF), en el que se plasma la estrategia y objetivos del instituto armado para lo que resta del sexenio.
En el contexto de la demanda de algunos actores sociales y políticos en el sentido de que los militares regresen a sus cuarteles y dejen en manos de la policía el combate al crimen, el presidente Felipe Calderón oficializó con el documento que los soldados se mantendrán en las calles durante todo su sexenio.
El Ejército Mexicano tiene ante sí el reto de convertirse en “unas fuerzas armadas modestas, pero mucho más operativas”, capaces de cumplir con su compromiso de crear las condiciones de seguridad necesarias para el desarrollo y bienestar de la sociedad civil, indica el texto.
Preocupa la deserción
Uno de los factores fundamentales para lograr ese propósito es elevar el nivel económico y social de los militares, lo cual se espera se traduzca en que a fin del sexenio se reduzca la deserción en 30 por ciento en relación con el sexenio de Vicente Fox, periodo en el que más de 100 mil soldados abandonaron las fuerzas armadas.
Por otra parte, el documento subraya que se tiene que fortalecer la capacidad técnica y operativa del Ejército y la Fuerza Aérea, lo que pasa necesariamente por la actualización, adiestramiento y modernización de su equipamiento. Además, se indica, las tareas encomendadas exigen incrementar “sustancialmente” las partidas en materia de mantenimiento, combustibles y lubricantes.
En relación con la seguridad interior, se destaca la encomienda de “recuperar la fortaleza del Estado y la seguridad en la convivencia social mediante el combate frontal al narcotráfico y otras expresiones del crimen organizado”.
Por ello, subraya, “la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) apoya irrestrictamente las políticas gubernamentales en materia de seguridad y participa activamente en el marco del Sistema Nacional de Seguridad Pública para preservar un orden nacional en el que los poderes públicos sean respetados como instituciones”.
Como parte de los objetivos planteados, la dependencia tiene por meta disminuir la siembra de enervantes en 70 por ciento y llevar a cabo “un total de 168 operaciones de alto impacto, dirigidas a la erradicación de cultivos ilícitos”, durante el sexenio de Felipe Calderón.
En otro orden, la Secretaría de la Defensa Nacional reconoce implícitamente la falta de coordinación que aún existe con la Secretaría de Marina –la cual comenzó a cambiar en esta administración–, y propone “fortalecer las acciones de interoperatividad, coordinación y cooperación con la Armada de México”, además de llevar a cabo acciones para realizar “un adiestramiento conjunto entre las fuerzas armadas de tierra, mar y aire”, así como establecer “una postura sólida” de ambas dependencias con respecto al Servicio Militar Nacional (SMN).
También se busca propiciar “un mayor diálogo, coordinación y cooperación” para fijar “una postura sólida” en asuntos de interés común, así como intensificar el intercambio académico y de especialistas entre las dos instituciones.
En otra parte, en un cambio de criterio respecto de las relaciones con otros ejércitos del mundo –necesariamente tiene que ver con Estados Unidos y Canadá–, se habla de “realizar reuniones recíprocas de carácter bilateral para atender temas de interés común que contribuyan a la consecución de acuerdos entre las fuerzas armadas”.
Finalmente, se plantea coadyuvar “al mantenimiento del estado de derecho a través del acotamiento de grupos armados” y enfrentar con mayor eficacia a quienes “pretendan desestabilizar la infraestructura de país”.
(La Jornada, 25 de enero de 2008)
viernes, 18 de enero de 2008
Ejército toma control de aduanas de Tamaulipas
Buscan obstaculizar el abastecimiento de narcos
Gastón Monge/ corresponsal
El Universal
Viernes 18 de enero de 2008
NUEVO LAREDO, Tamps.— A unas horas de haberse anunciado el programa binacional entre los gobiernos de Estados Unidos y México para impedir el tráfico de armas a nuestro país, fuerzas de élite del Ejército tomaron el control de los puentes internacionales en Tamaulipas, desplazando de forma sorpresiva a elementos de inspección de aduanas.
Al mismo tiempo, la Marina anunció también el despliegue de fuerzas especiales de aire, mar y tierra en Tamaulipas y otros dos estados de la República y el envío de buques destructores a las costas tamaulipecas.
El Cuerpo de Fuerzas de Apoyo Federal del Ejército y la Fuerza Aérea Mexicana, creado en mayo de 2007 por instrucciones del presidente Felipe Calderón para combatir el crimen organizado, inició operativos de revisión en los cruces internacionales de Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros en busca de armas de fuego, explosivos y droga.
El Proyecto Gunrunner, que pretende frenar el tráfico de armas en la frontera norte del país, fue puesto en marcha por los gobiernos de Estados Unidos y México en un intento por obstaculizar el abastecimiento de armamento a narcotraficantes mexicanos. En Tamaulipas se denominó Operativo Noreste, que une esfuerzos en la materia entre los gobiernos federal y estatal para proteger la región fronteriza.
Los militares de élite, visualmente identificados por utilizar boinas rojas, se instalaron en los puentes Juárez-Lincoln y De las Américas, en Nuevo Laredo, así como en los puentes internacionales de Reynosa-Pharr y Reynosa-Hidalgo, y Los Indios y Los Tomates, en Matamoros. Desde las 08:00 horas, militares ocuparon instalaciones fiscales del puente internacional Reynosa, Tamaulipas-Hidalgo, Texas. Los “boinas rojas” se apostaron también en las instalaciones del puente Ignacio Zaragoza, donde se encuentra la Aduana de Matamoros, así como en otras dependencias federales.
De esta manera quedaron relegados los elementos de la Unidad de Inspección Fiscal y Aduanera (UIFA) por el cuerpo de élite de apoyo federal, contrario a lo publicado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) el 9 de mayo de 2007 en el Diario Oficial de la Federación.
El decreto de creación de este cuerpo especial señala que en ningún caso podrá sustituir en las funciones que legalmente competan a las autoridades apoyadas.
Durante los operativos militares en Tamaulipas, que se suspenderán hasta nuevo aviso, son revisados aleatoria y minuciosamente los conductores que arriban a México y los que buscan internarse a Estados Unidos.
Al aeropuerto General Lucio Blanco, de Reynosa, llegaron dos aereonaves tipo Hércules de la Policía Federal, con elementos de cuerpos federales. Todos los elementos subieron a vehículos tipo tanquetas, jeeps, y camiones que los llevaron a la Octava Zona Militar. Fuentes del sector revelaron que los elementos serían desplegados en varios municipios del norte de Tamaulipas.
En Nuevo Laredo se sumaron a las fuerzas ya desplegadas 300 elementos del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (Gafes), de la Sedena, quienes arribaron la tarde y noche del miércoles al aeropuerto internacional de esa ciudad a bordo de la aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana con matrícula 3613.
Este apoyo se da luego de que en días pasados otros 300 elementos de la Policía Federal se sumaran a las labores de vigilancia, y del encuentro entre el gobernador Eugenio Hernández Flores, 10 alcaldes de las ciudades más importantes del estado y el subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial de la Secretaría de Seguridad Pública, Patricio Patiño Arias.
La medida es inusual ya que en operativos anteriores los militares se apostaban afuera de los cruces fronterizos para realizar las revisiones a automovilistas, pero ahora se apoderaron en su totalidad de las instalaciones aduaneras.
La Armada de México reforzó también la seguridad en Tamaulipas, Michoacán y Guerrero con el despliegue de elementos de fuerzas especiales en aire, mar y tierra. Las acciones se desarrollan también desde el límite norte del estado de Michoacán hasta Zihuatanejo, Guerrero.
De la misma forma, Querétaro amaneció ayer con mayor presencia policíaca, recorridos “discretos” de vehículos militares y la instalación de retenes en varios puntos de la capital. (Con información de Silvia Otero y Juan José Arreola, reportera y corresponsal)
(El Universal, 18 de enero de 2008)
lunes, 14 de enero de 2008
Las Chivas, la militarización y el autoritarismo
JORGE GÓMEZ NAREDO
El Grupo Sur, formado por intelectuales tan acreditados y destacados como Guillermo Almeyra, Armando Bartra o Gabriel Vargas Lozano, publicó ayer en La Jornada un comunicado intitulado “Alto a la tentación dictatorial”, donde esgrime argumentos sobre la posibilidad de un régimen autoritario bajo la égida de Felipe Calderón. No cabe duda que existe un proyecto planeado con bastante detenimiento para instalar una especie de dictadura disfrazada y justificada por la manipulación de los conceptos “democracia”, “derechos humanos” y “estado de derecho”.
En fechas recientes el poder civil se ha mezclado con las fuerzas marciales, con el Ejército. Los espots de televisión de la Presidencia muestran imágenes militares amalgamadas con la voz de Felipe Calderón y con un discurso autoritario encubierto en una supuesta “seguridad de todos los mexicanos”. Los operativos en contra del narcotráfico regalan cientos de imágenes a las televisoras para que sean exhibidas y repetidas hasta el hartazgo, dando el mensaje a todos los ciudadanos de la existente de un México con orden y control, donde cualquier desviación al pensamiento hegemónico será castigada.
El 3 de enero pasado, Felipe Calderón recibió en Los Pinos al conjunto campeón del balompié mexicano, las Chivas. En esa ocasión, Jorge Vergara (dueño del club) obsequió al panista una casaca del equipo que éste prontamente vistió: las fotografías del “presidente chiva” fueron difundidas hasta la saciedad, la imagen dio la vuelta a México y fue interpretada por muchos como un símbolo de unidad, pues el Rebaño Sagrado, uno de los equipos con mayor afición, tiene como una de sus características más celebradas el jugar solamente con deportistas nacionales, una especie de nacionalismo futbolero. El viernes pasado, ese mismo equipo acudió a una sesión fotográfica a la base militar La Mojonera, ubicada en el municipio de Zapopan. El espectáculo fue elocuente: los futbolistas subidos en una tanqueta, sonrientes, jugando con las metrallas y rodeados de efectivos de la Armada con rostros camuflajeados. La mezcla es interesante y preocupante: por un lado, el campeón del balompié mexicano (el deporte más socorrido por la población) y, por el otro, los militares.
¿Qué significa esta “extravagante” sesión fotográfica? Según Andrés Fábregas Puig, actual rector de la Universidad Intercultural de Chiapas y ex investigador de El Colegio de Jalisco, en su libro El rebaño sagrado: el futbol como integrador de identidades el equipo de las Chivas es un símbolo no solamente regional, sino nacional y, por ende, tiene la capacidad de integrar al ser mexicano (una especie de tequila pero en balompié). ¿Por qué Jorge Vergara (quien declaró el 10 de diciembre de 2006: “si se lo dedicamos [el título] a alguien sería al gobierno de México, que arranca como el Campeonísimo nuevo”) decidió utilizar todo el capital simbólico de las Chivas para unir los objetivos militares con los del conjunto deportivo? ¿Por qué los jugadores de uno de los equipos más populares del futbol mexicano aparecen en primera plana en la mayoría de los periódicos, montados en una tanqueta y mostrando disciplina cercana a la marcial? ¿Cuál es el mensaje? El significado es claro: el Ejército, Felipe Calderón y las Chivas son lo mismo, persiguen los mismos objetivos y, por ello, hay que apoyarlos. Los dirigentes del equipo así lo entienden; tal es el caso del ex presidente de la Coparmex Jalisco y actual director general de Chivas, Juan José Frangie, quien durante la sesión fotográfica declaró: “para nosotros es un honor que el Ejército nos haya dado la oportunidad de tomar la foto; tenemos cosas similares, como que somos puros mexicanos, nosotros ahora somos el mejor, el equipo campeón y el Ejército es la institución más digna de México”.
México poco a poco se militariza y se acostumbra (ya sea por la cercanía física o por la mediática) a la presencia marcial, se introduce, como lo mencionan los integrantes del Grupo Sur, a la “tentación dictatorial”. Felipe Calderón escogió el peor de los caminos para legitimarse: la fuerza y la intimidación. Con base en la mentira ha elaborado y montado un espectáculo donde los símbolos populares se mezclan con el castigo, la disciplina y la obediencia, escenas que siempre han estado apoyadas por buena parte de los medios de comunicación.
Esa es la apuesta de Calderón: el miedo, la intimidación, la mentira y la cotidianidad de la convivencia con el Ejército. Pero no ha funcionado, porque hay coraje, miseria, rencor, discriminación, pobreza y miles de ciudadanos que aguantan silenciosamente, que un día se cansarán del silencio y explotarán contra los responsables directos: Felipe Calderón, el PAN y todas las instituciones que no han podido contrarrestar, y sí ahondar, las diferencias sociales. Tenemos un polvorín llamado México que hace tic-tac, tic-tac.
jorge_naredo@yahoo.com
(La Jornada Jalisco, 14 de enero de 2007)
domingo, 13 de enero de 2008
Asesinan a un joven por no detenerse en un retén militar en Michoacán
Enfrentamiento entre bandas de narcotraficantes en Cancún deja saldo de dos muertos
De los corresponsales
Militares y policías federales ultimaron a un joven de 17 años, quien acompañaba a un amigo que hizo caso omiso de los señalamientos de que se detuviera en un retén instalado en la ciudad de Huetamo, informó la Procuraduría de Justicia de Michoacán.
Los hechos ocurrieron la noche del viernes cuando Víctor Alonso de la Paz Ortega viajaba como copiloto de Juan Carlos R. García, en una camioneta con placas NH80812 de Michoacán. Elementos del Ejército Mexicano, de la Agencia Federal de Investigación y la Policía Federal Preventiva pidieron al conductor que detuviera el vehículo para revisarlo, pero éste aceleró, por lo que le dispararon y uno de los proyectiles le dio en la espalda a su amigo y le ocasionó la muerte.
Elementos del Ejército también fueron acusados ante Erick Alejandro González Cárdenas, visitador regional de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Apatzingán, de haber cateado las viviendas de Javier Ortiz, encargado del orden de La Limonera, municipio de Tepalcatepec, y de otras autoridades locales sin ninguna orden de por medio, pero además golpearon y le pusieron en la cabeza una bolsa de plástico al señor Miguel Ángel Alcázar, lo que le provocó un desvanecimiento. Los hechos ocurrieron, según los denunciantes, el 9 de enero.
En otras acciones ocurridas en los estados de México, Quintana Roo, Sinaloa, Guerrero, Durango y Chihuahua fueron asesinadas 10 personas, la mayoría relacionadas con el crimen organizado.
El más grave fue un enfrentamiento entre pistoleros de dos grupos vinculados al narcotráfico ocurrido el mediodía del sábado en Cancún, Quintana Roo, que dejó como saldo dos muertos y tres heridos de bala, quienes fueron internados en hospitales de la ciudad, informó el procurador de Justicia del estado, Bello Melchor Rodríguez.
La riña se inició cerca del estadio sede del equipo de futbol Potros del Atlante, cuando Luis Ángel González Pérez, de 26 años de edad y originario del estado de México, fue perseguido por sicarios y se refugió en una vivienda ubicada en las cercanías del parque Cava, hasta donde lo llegaron a ultimar. La identidad de la otra víctima no fue revelada.
La intervención de los agentes de las policías preventiva y judicial del estado hizo posible la localización del cadáver, que tenía en su mano una granada de fragmentación. Asimismo, se incautaron ocho armas largas (AK-47 y R15), seis granadas de fragmentación y dos vehículos.
En el estado de México, la Agencia de Seguridad informó del fallecimiento de Rubén López Colín, uno de sus policías, y de heridas graves a otro, Edgar Cortés Fuentes, durante un enfrentamiento y persecución de una banda de delincuentes en la colonia Aurora tercera sección, en Toluca.
En Sinaloa, desconocidos asesinaron con armas punzocortantes a Marcos Verdugo López, de 30 años, en el módulo 10-A del penal de Culiacán. La víctima estaba bajo proceso por delitos contra la salud y tenía al menos 20 heridas en pecho y abdomen, informó Servicios Periciales de la Procuraduría de Justicia estatal. También en la capital sinaloense, agentes municipales localizaron el cuerpo de una persona ultimada de tres balazos en una zona deshabitada del fraccionamiento Los Huertos.
En Durango, un hombre fue hallado muerto de un balazo en la cabeza, con las manos atadas y los ojos vendados en el ejido Las Huertas, a unos metros del lecho seco del río Nazas, en Lerdo, indicó Arturo Sánchez, subprocurador de Justicia en la zona.
La mañana de este sábado fue ejecutado a balazos en el municipio de Buenavista de Cuéllar, en la zona norte de Guerrero, el artesano José Antonio Delgado, de 20 años de edad, por dos sujetos que portaban pistolas calibre 380.
En Chihuahua, la Subprocuraduría de Justicia Estatal Zona Norte, con sede en Ciudad Juárez, informó que la madrugada del sábado fue localizado el cuerpo de un hombre, atado de pies y manos y con huellas de tortura, en un lote baldío de la calle Sabino Hinostrosa y Ejército Nacional, al suroriente de la localidad.
Asimismo, dijo que Gabino Reyes Zavala y su novia Cristina Nava Sánchez, de 15 y 16 años de edad, fueron agredidos a balazos la noche del viernes en la colonia Bosques de Salvárcar, y murieron cuando eran trasladados a un hospital.
La madrugada de ayer desconocidos hicieron al menos cinco disparos de armas de fuego afuera del edificio en que reside Alberto Capella Ibarra, secretario de Seguridad Pública de Tijuana, Baja California, quien confirmó la agresión. Los agentes buscaron a los agresores sin éxito. Los agresores viajaban en un vehículo Tahoe.
En noviembre, el antiguo domicilio del funcionario fue atacado por un grupo armado que hizo más de 200 disparos, pero repelió la agresión y salió ileso.
Con información de E. Martínez, J. Chávez, J. Valdez, S. Ocampo y R. Villalpando, y Notimex
(La Jornada, 13 de enero de 2008)
sábado, 12 de enero de 2008
Dispara Ejército contra camioneta en Michoacán; un menor muerto
Morelia, Mich. Un joven de 17 años murió al ser alcanzado por un disparo de elementos del Ejército Mexicano, quienes abrieron fuego contra la camioneta en la que viajaba el menor, luego de que el conductor se negó a detenerse en el retén instalado en el Barrio del Toreo.
Los hechos, según los primeros reportes policiacos, ocurrieron la noche de este viernes cuando el conductor de la camioneta Ford tipo Courier color rojo, al pasar por el citado retén, imprimió mayor velocidad al vehículo tras la orden de los elementos castrenses de detenerse.
Tras lo ocurrido, los uniformados abrieron fuego como supuestos disparos de advertencia, sin embargo, una de las municiones impactó en Víctor Alfonso de la Paz Vega, quien perdió la vida.
El conductor del vehículo, de quien sólo se sabe se apellida Peñaloza, fue aprehendido y trasladado a una instalación de seguridad.
Familiares de la víctima aseguran que el joven no estaba involucrado en ningún hecho delictivo.
(La Jornada, 12 de enero de 2008)